Stick To Your Guns | Madrid, 2019

Stick To Your Guns + Nasty + Get The Shot
09.04.2019 – Sala Caracol (Madrid)
Route Resurrection
Fotos: Aldara ZN

Nueva noche imprescindible de hardcore de la mano de Route Resurrection. En esta gira toca disfrutar de tres bandas que se formaron a mediados de la pasada década en tres partes diferentes del planeta y que cuentan con sonidos bastante diferenciados. A Get The Shot, Nasty y Stick To Your Guns les une el origen de su sonido, buena parte de su mensaje y un fuerte sentido de comunidad hardcore.

Esta crónica se podría titular «I’m too old for this shit», mítica frase de la película Arma Letal. Ya en la cola, notamos que le sacamos unos cuantos años a la media de edad de lxs asistentes. Seguramente el motivo es que no nos encontramos con bandas clásicas, sino con tres grupos en proceso ascendente o de consolidación, aunque Stick To Your Guns ya lleve un tiempo entre nuestras favoritas. Entramos a la sala y hábilmente cogemos sitio en una zona elevada que nos separará de las zonas más activas del pit. Además nos permite ver mejor, porque la chavalada de ahora es altísima. Después de reírnos unas cuantas veces de nuestra actitud abuelil, me consuela ver como nuestra zona segura empieza a congregar viejxs conocidxs con nuestras mismas intenciones.

Podría decirse que el primer grupo sirvió como calentamiento de lo que vendría más tarde. Pero como se trata de Get The Shot, el/la que no hubiera calentado en casa se arriesgaba a lesionarse. Tan pronto como se hace el silencio entre la música de ambiente y los primeros riffs, se abre el pit y empiezan los movimientos a lo «Tigre y dragón». Primera vez que vemos a los de Québec desde que han publicado su tercer LP «Infinite Punishment» y primera vez que no es al aire libre como en el Resu o en el Hellfest. Estar encerrados entre cuatro paredes no les resta de su capacidad para transmitir energía, no solo a través de su mezcla de hardcore y crossover sino físicamente. Esta es una de las cualidades que les hace una banda con un gran proyección y que su cantante explota infatigablemente desde el escenario, cantando sobre el público o apareciendo en la otra punta de la sala inexplicablemente.

Tras ellos es el turno de Nasty. Un grupo mucho más prolífico y que se ha trabajado incansablemente los escenarios más pequeños de por aquí. Los belgas se caracterizan no solo por su mensaje sino también por la contundencia de su música. De hecho, en su afán por llevar su sonido a lugares más extremos que el hardcore y el beatdown, hay momentos de canciones que rozan el black metal más extremo. Por suerte, pueden desarrollar toda su contundencia gracias al sonidazo que suele tener la sala Caracol desde hace ya tiempo. Pese a todo el evento tocando casi en la penumbra, tanto ellos como Get The Shot han sonado impecable. Cuando la apisonadora de Nasty deja de sonar, la espera nos es amenizada con una lista de reproducción de pop, especialmente bien recibida es «Take on me» que acaba siendo coreada por todxs lxs presentes como si fuera un tema de Agnostic Front.

Todo está listo para que salten al escenario Stick To Your Guns y lo hacen entre temazos pero con un sonido que mejoraría a lo largo de las primeras canciones. Concierto centradísimo en sus tres últimos discos, especialmente en «Diamond» que supuso su mayor crecimiento a todos los niveles. Durante cerca de una hora intercalan los elementos más característicos de esos discos: canciones accesibles coreables, contundencia y, la recién adquirida, intensidad. Intensidad que les ha llevado a nuevos sonidos en su último disco «True View» y que ya se dejaba ver en el anterior EP «Better Ash Than Dust», del cual tocan la emocionante «The suspend». Sus mejores temas los han ido soltando durante todo el show de manera equilibrada, por lo que tras su último himno «Married to the Noise» solo queda tiempo para «Amber» el tema más antiguo de la noche y una última descarga con «Nobody».

 

STICK TO YOUR GUNS

 

NASTY

 

GET THE SHOT

crim sala la mirona 2019

Crim + Violets + Batec | Sala La Mirona, Salt

Crim + Violets + Batec
15.02.2019 – Sala La Mirona, Salt, Girona
Texto: mayodel37

(Al desconocer la rigidez editorial de las élites de Rockodrome, siendo madrileñxs fijo que de imperialistas no bajan, he decidido escribir una versión para todos los públicos y evitar ser censurado).

Tras liarla parda en Carcelona, marcándose un sold out en la Razz 2, que Crim no tocaban por tierras catalanas, así que tenemos mil ganas de ver, y sobretodo disfrutar, de su regreso.

Decido que por primera vez en mi vida iré a ver a Crim en modo profesional, no beberé demasiado, cenaré y estaré atento a todos los acontecimientos que vayan sucediendo para poder narrarlos tal cual ocurran.

Mi gozo en un pozo, pa cuando entramos en La Mirona ya voy medio pedo y lo hacemos justo al empezar Batec, léase faltan unas dos horas pa que toque Crim.

Lloro de felicidad al ver que La Mirona está en su modalidad reducida. La versión peque de esta sala crea el ambiente perfecto pa un bolo de punk, pronunciado con U. No hay vallas ni demás mierdas que alejen a la parroquia de las bandas, el escenario es pequeño y no debe llegar ni al metro de altura y queda to bien recogidico.

La primera banda en tocar es Batec. Este cuarteto formado por una bestioleta de ponent, amor eterno a Karbunko, y vallesans ya acompañó a Crim en el bolo de la Razz.

Las segundas en tocar son Violets, pa cuando ellas empiezan mi medio pedo es ya castaña así que no puedo evitar empezar a twerkear, lo mismo le ocurre a otras, hay algún amago de pogo a finales del bolo de Violets y empieza a caldearse el ambiente.

Suena la intro esa rara que ya sonó en Razz, Crim is in da jaus y las allí presentes ya estamos con unas ganas de jarana preciosas. Arrancan con «Potser no hi ha Final» empalmada con «Caiguda Lliure». Para mi asombro la gente está muy tranquila pero todo cambia con «Hivern Etern» empezando el bolo de verdad. Vasos por el aire, personas por el suelo y llega el primer momentazo de la noche.

A medio tema sube un chaval al escenario, se da una vueltecica y salta al público, vamos, lo normal. Pues Adri, cantante de Crim, al acabar la canción nos informa que en La Mirona lo de subir al escenario y saltar está mal visto, a lo que se me acerca un chico, cuya borrachera ridiculizaba la mía, me rodea con el brazo y me dice al oído «pos ara pujem totes i a vore que fotent els segurrates imbècils aquests» (pos ahora nos subimos todas y a ver qué hacen los segurratas imbéciles estos). No pude más que morir de amor, darle un beso a tan preciosa persona y tirarme el resto del bolo en el pogo.

El segundo momentazo de la noche se vivió a mitad de «La puta copa del rei», como si los realizadores de TVE estuvieran a los mandos y no quisieran pitidos al himno, se fue la luz de la sala. Esto fue aprovechado por muchas para cantar o pillarse una birra, yo que ya estaba en un concierto paralelo lo aproveché para gritar indistintamente «No hi serem», canción que para mi desgracia jamás tocan, y «batería t’estimo», ese chico tiene un algo que me suliveya.

Resueltos los problemas vuelven a tocarla y sigue el concierto sin más problemas, salvo pa los seguratas que vieron que lo de no subir y no saltar como que ya si eso en otra ocasión. Van tocando temazos como «Benvingut Enemic», «Quan tornin les sirenes», canción dedicada a todxs lxs asquerosxs que aplaudieron a los gossos d’esquadra los días posteriores al 1 de octubre, de ahí que ame fuertemente esa canción, «Maneres de viure» o «Vaixells de paper», entre otras, para dar paso a «Pare nostre que esteu a l’infern», canción que aunque sea de las nuevas ya es un himno.

Aprovecharon el final de pare nostre para hacer eso de los bises, cosa que jamás entenderé, eso del ahora me voy ahora vuelvo me parece una tontez, pero lo hace casi to dios así que algún sentido que se me escapa tendrá.

Vuelven y tocan «Castells de sorra». Castells es la canción, no hay absolutamente nadie que no grite «Per què collons m’he de fer gran», personas cayendo encima del escenario, alguien por los aires continuamente, vamos, lo que viene siendo amor. Recordar que me tiré tol bolo en la zona pogo, lo que hiciera u hiciese la gente civilizada más atrás será siempre un misterio para mí.

Empalman Castells con «I ara et sents trist», otro temazo de aúpa que todas gritamos y que da final al concierto con todas las asistentes chillando «per la teva hostilitat».

crim sala la mirona 2019

crim madrid 2019 (3)

La Wurli llena y Crim fetén

Crim + Nitropollo
19.01.2019 | Wurlitzer, Madrid
HFMN Crew

La extensa gira de Crim les llevó el pasado 19 de enero hasta la sala Wurlitzer de Madrid. Entradas agotadas con la sala llena de gente esperando una sesión de buen punk.

La noche empieza con Nitropollo. La banda está compuesta por integrantes de grupos míticos como Zinc, Bultacos, Vecchias o Wipe Out Skaters, y eso se nota. No es la primera vez que los veo y cada vez me gustan más. »What´s the point» es el título del discazo que publicaron el año pasado y durante el concierto le dieron un buen repaso. Sonaron temazos como »Pollo song», »You», «We are alive», «All the time», «No más» , «Afraid», ‘Weekend break» y las versiones de New Bomb Turks y de The Only Ones incluidas.

crim madrid 2019 (10)

Para cuando me quiero dar cuenta, la sala ya está llena de gente. La verdad es que no lo esperaba y, por lo que se ve, Crim tampoco.

Durante el concierto, Crim realizan un buen repaso de todo su trabajo. Comienzan con «Potser no hi ha final», el primer tema del último disco «Pare nostre que esteu a l’infern». Un tercio del concierto está dedicado a este último disco con los temas «Pare nostre que esteu a l’infern», «La puta copa del rei», «Caiguda liure», «Hivern etern» y «Quan tot sigui fosc». Otro tercio para el álbum «Blau sang, vermell cel» con los temas «Benvingut enemic», «Una canço i una promesa», «Maneres de viure», «Vaixelles de paper» y «Blau sang, vermell cel». Los temas de su primer álbum «Temps era temps», «Cavalls morts» y «Castells de sorra» aparecen entremezclados a lo largo de setlist, además de la versión de Turbonegro y «Sense Excuses».

Desde el principio el público no para de saltar y cantar cada tema de Crim. Picos de emoción con temas como «Castells de sorra», «Hivern etern», «Pare nostre que esteu a l’infern». Se nota la emoción entre nosotrxs y también desde el escenario. Crim están flipando con la entrega inesperada en Madrid.

¿Para cuándo vuelven por Madrid?

CRIM

NITROPOLLO

kaseo madrid 2018 (25)

Kase.O | 21.12.2018, Madrid

Kase.O
21.12.2018 Palacio de Deportes (Madrid)
Fotos: Aldara ZN

«Kase.O ha vuelto al ejercicio» es la primera frase que retumba en el edificio al sumarse la voz que sale por los altavoces y las miles de voces que la gritan a la vez. Kase.O ha vuelto a llenar el Palacio de Deportes de Madrid con su ejercicio: rapear. Si hace un año no lo hubiera hecho, tendríamos que comentar lo histórico del acontecimiento. Pero la historia se ha repetido y toca fin de ciclo. El objetivo está claro: cerrar El círculo. Un proyecto que empezó hace más de dos años y que hoy será repasado exhaustivamente por (pen)última vez para dar paso a un retiro que permita a Kase.O crear un nuevo proyecto.

Durante más de dos horas y acompañado por R de Rumba a los platos y El Momo a los coros, Javier Ibarra desgrana uno a uno los temas de su último disco, a excepción de los dos interludios y el tema con Violadores del verso. Los cinco primeros temas del concierto son los cinco primeros de el disco, en el mismo orden. Tras ellos toca el único bloque que concederá a lxs nostalgicxs. Comienza un viaje hacia atrás en el tiempo con “Pura droga sin cortar” del Vivir para contarlo y “Ninguna chavala tiene dueño” de Vicios y Virtudes. El viaje culmina con un popurrí en el que se suceden rápidamente, desde una estrofa a tan solo una frase, algunos de sus temas más míticos: “Vicios y virtudes”, “Quieres”, “Ocho líneas”, “La ciudad nunca duerme”, “Nada que hacer”, “Ballantines” y “Hardcore funk”.

kaseo madrid 2018 (25)

Tras un par de temas más de El círculo, el siguiente segmento del concierto es para las colaboraciones. Con un hilo conductor narrado por Kase.O y los efectos de sonido de Rumba, se unifican las historias de “Mazas y catapultas” y “Mitad y mitad”. En la primera cuenta con la presencia de una emocionada Rozalén, que no se irá del escenario sin hacer un freestyle sobre un beatbox hecho por el propio Kase.O. En “Mitad y mitad” cuenta con la colaboradora original de la canción, Nawja Nimri, emocionada de otra manera. Después, un par de temas en los que el colaborador fue él. Primero, una de sus colaboraciones más recientes “Guerrero psicodélico” del último disco de Foyone. Después, la mítica “Billete de ida hacia la tristeza”, colaboración con Míos tíos de casi 20 años de antigüedad, recuperada para esta gira. Entonces aparece Xhelazz para, sobre la misma base, hacer su “Confesionario de papel”. Como es lógico no abandona el escenario porque es el momento de “Viejos ciegos” y para ello se les une Sho-Hai.

Nos adentramos en la recta final de la noche. Kase.O usa la hipnosis para que podamos acompañarle en el viaje cósmico de “Repartiendo arte”. Durante todo el concierto y especialmente hacia el final, hay muchos momentos en los que Kase.O se dirige al público con largos discursos cargados de superación, positividad y agradecimiento. Estos tres conceptos son la clave de cada uno de los tres últimos temas: “Basureta”, “Cantando” y la “Outro” de El círculo.

Si El círculo es el claro resultado de una mala etapa y su superación, podemos intuir ya por dónde irán los tiros de lo que vendrá. Hemos visto su éxito a nivel profesional y hemos presenciado la extensión de la libertad creativa que tuvo en el estudio a la libertad en la actitud sobre el escenario. Ha bailado lo que le ha dado la gana y como le ha dado la gana, lejos de la impostura que exige el rap, se ha emocionado con su público y ha terminado cantando una canción de Xuxa con su hija. El círculo queda cerrado. Ahora toca esperar y escuchar lo próximo que nos ofrecerá Kase.O.

Fandemonium 2018

Fandemonium 2018

15.11.2018
La Boite (Madrid)
Fotos: Aldara ZN

No es hasta que llega el frío a la capital, cuando las capuchas pasan desapercibidas y los abrigos pueden esconder objetos útiles, cuando la editorial La Felguera organiza un festival a su medida y a la de sus agentes provocadores.

La segunda edición de Fandemonium se ha celebrado a lo largo de una semana y ha albergado todo tipo de eventos, repartidos por varios rincones de Madrid: conferencias sobre magia, performances inmersivas, rutas guiadas o debates entre músicos y científicos; han tenido lugar en librerías, sótanos y cementerios.

Lxs agentes, que también pertenecemos a Rockodrome, hemos estado en varias de estas citas: la visita al pequeño museo Torres Quevedo, inventor del primer mando a distancia y autómatas ajedrecistas; la apasionante ruta por el Useras rebelde, de la mano de Héctor Melchor (Sudor); y el punto álgido del festival que supuso La noche de Fandemonium.

En la céntrica sala La Boite se celebró el único evento de pago del festival. La noche de Fandemonium no podría ser otra cosa que un gabinete de curiosidades seleccionado por La Felguera. Aquí la normalidad no tiene cabida y tampoco se la echa en falta. La encargada de conducir la noche es Laura Inclán, una irreverente cupletista, que con humor interpreta unos cuantos cuplés para alguna víctima que sube al escenario y lxs, sorprendentemente, numerosxs fans del género que había en la sala. ¿Puede ser el sucesor del trap? Este agente no iba a revelar el soplo recibido pero, como Laura Inclán no tuvo inconveniente en anunciarlo, puede que el cuplé se convierta en la próxima moda a raíz del libro sobre cupletistas que publicará el año que viene La Felguera.

Tras ella, es el momento de Raúl y Jaime Figueroa. Jaime es un ventrílocuo y cómico. Raúl, su hermano gemelo, es una marioneta de tamaño natural con tendencia al alcoholismo. Su espectáculo es un crucero decadente, valga la redundancia, que rápidamente conectó con un público que se divirtió y entró en el juego como si volvieran a la infancia.

Después suben al escenario Los Caballos de Düsseldorf, encarnadxs para la ocasión en Llanto Cacofónico del Demonium, un duo solo tolerable para amantes del noise y la experimentación. Perfecto para la noche de hoy. Entre sus manos tienen multitud de instrumentos caseros, los cuales son exprimidos para recorrer todas sus texturas hasta llegar a momentos verdaderamente interesantes y potentes.

Para cerrar la noche, Javier Díez Ena junto a su inseparable theremín ponen música a “El anillo que mata”, uno de los episodios de Les Vampires. El sonido del theremín se adapta como un guante a la textura de las imágenes rodadas en 1915. Lo mismo sucede con la interpretación de Javier, cuya música se integra en la historia, distando notablemente de lo que hemos podido ver en anteriores conciertos suyos. Nunca deja de sorprender la complejidad de los sonidos que producen y más cuando se han compuesto para una ocasión posiblemente irrepetible.

Vodun + Mirloblanco + Otus | 24.10.2018, Madrid

Vodun + Mirloblanco + Otus
24.10.2018 – Wurlitzer Ballroom (Madrid)
Fotos: Aldara ZN

Volvemos una noche más al Wurlitzer, esta vez a celebrar junto al programa Bandera Negra el inicio de su nueva temporada en Radio3. Para ello, y de la mano de Nooirax, tendremos sobre el escenario a Otus, Mirloblanco y Vodun.

Para ir calentando los oídos, sube al escenario Otus acompañado únicamente por su guitarra acústica, la pedalera de loops e incienso. Otus es el proyecto en solitario de Juan, cantante y guitarrista de Aathma, cuyo sonido es totalmente complementario al de su banda. Para reproducir el sonido de su primer disco “Death Throes” se ayuda de los ya habituales loops en directo, con los que convierte el sonido de su guitarra o su voz en coros, drones y hasta en canto difónico. Con todos estos ingredientes, sumados al silencio del público, Otus consiguió llegar a la profunda atmósfera necesaria para que funcione su oscuro folk.

Nuestro descubrimiento de la noche son Mirloblanco con su potente y sudorosa stonerización de Black Sabbath, en la que destaca el estilo del bajista. Tanta era la potencia que los plomos de Wurlitzer saltaron, dejándonos a oscuras y con las ganas de más riffs. El tiempo de Mirloblanco quedó acortado y solo tuvieron tiempo para tocar un último tema y despedirse.

Durante la hora que duró el apagón, mientras la buena gente del Wurli y el guitarrista de Vodun arreglaban el cortocircuito, se formaron corrillos para hablar, entre otras cosas, de apropiación cultural. Es broma, esto es la vida real, no Twitter. La vuelta de la energía a la sala, acompañada de una ovación, permitió que Vodun pudieran descargar su propia energía sobre el escenario. Pese al peso y lo original de su parte vocal, es destacable la labor de la batería y la importancia que tiene el ritmo en Vodun. Ritmos que eran reforzados con la percusión de la cantante e incluso en un tema se unieron el batería y bajista de Mirloblanco. Sobre el único guitarrista recae toda la carga de los riffs, los cuales son todavía más carismáticos en los temas de su segundo y reciente trabajo “Ascend”.

Al final, ni la interrupción pudo evitar el pedazo de bolo que se marcaron Vodun. Su potencial para llegar a un público más amplio es obvio, ya les pudimos ver en el Hellfest delante de bastante más audiencia, esperemos que solo sea cuestión de tiempo ocupar el lugar que se merecen.

VODUN

MIRLOBLANCO

OTUS

Shirley Davis & The Silverbacks - Lofuki 2018

Lofuki Festival 2018

01.09.2018
Parque Liana (Móstoles)
Redactor: R13
Fotógrafa: Aldara ZN

La primera edición del festival Lofuki nos permitió disfrutar en unas pocas horas de un amplio espectro de la música negra. Hasta el Parque Liana de Móstoles se acercó poco a poco, según permitía el sol, un aún mayor espectro de personas con ganas de disfrutar del suculento cartel.

Tras una breve pinchada de Sholo Truth, los miembros de Ogun Afrobeat salieron a enfrentarse al mismo sol que mantiene al todavía escaso público que se refugiaba a la sombra de los árboles. Las voces y ritmos tradicionales se fundieron con un variopinto grupo de músicos que aportaron un sonido más funky.

La siguiente banda es Shirley Davis & The Silverbacks con su soul que conecta Londres y Madrid. Con Shirley empieza el progresivo viraje del festival hacia la hegemonía de la voz frente a los instrumentos. El parque empieza a recibir a más gente y algunas acaban bailando sobre el escenario al ritmo la banda. Con Bloody Blanco avanzamos un paso más hacia el rap con el que acabará noche. Se reduce el número de instrumentos y además de la voz de Miryam Latrece, por turnos, se escuchan los primeros raps de la tarde. Ergo Pro es el encargado de romper el hielo y, tras él, el gran Aaron Baliti no tarda en tomar las riendas del. Una lástima la cancelación de la participación de Elphomega que fue sustituido por Duddi Wallace.

Para los dos últimos shows ya no queda ningún instrumento sobre el escenario. El de Organic Name, es el concierto más flojo del día. Mostraron dificultades para llevar al directo su trabajo de estudio, fallos que les hicieron llegar a empezar hasta tres veces la misma canción. Lo nunca visto. La tarea de cerrar la noche en alto estaba en las manos de MDE Click. Lo consiguieron, a juzgar por la respuesta del público, a costa de dejarse la voz. Terminaron de romperlo dejando para el final el banger “El lehendakari”.

MDE Click

 

Organic Name

 

Bloody Blanco

 

Shirley Davis & The Silverbacks

 

Ogun Afrobeat